18 agosto 2008

La maquinita del bar (2) : Wrestlefest

Si hay un videojuego donde servidor ha invertido más horas, ha sido este. Hubo algún empresario avispado que puso un local de videojuegos cerquita de un instituto ( del mío). Habian creado un monstruo. (ja ja)

Wrestlefest es un juego de lucha libre, una licencia de la WWF (no el fondo de conservación de especies, me refiero al pressing catch que nos ofrecia telecinco allá por el año 91).

Podiamos escoger entre diez luchadores para jugar, ya que los de "Legion of Doom" nos estaban vetados y reservados para enfrentarse a nosotros en los combates finales.


Había dos modos de juego. La royal Rumble, que consistía en subir al ring con varios luchadores y realizar un todos contra todos. Una ensalada de tortas. Tenías que eliminar luchadores, mediantes la consabida cuenta de 3 , por abandono, o tirarlos fuera del cuadrilatero.
Nadie en su sano juicio escogía jugar a la royal Rumble, ya que a pesar de ser barato (25 pts), podía suceder que en la refriega, un luchador rival te sacara del ring a las primeras de cambio, y eso duele, oiga.

El otro modo, más popular, era el "Tag Match", o lucha de parejas. Aquí escogiamos a dos luchadores para luchar contra la máquina. Pasabamos por varios combates hasta medirnos a los "Legion of Doom".


La mayor baza de Wrestlefest, eran los muñecos grandes y bien reconocibles, a pesar de tener diseños parecidos. La versatilidad de los personajes, que disponian de un gran número de movimientos: llaves, agarres, puñetazos, patadas ( inútiles por otra parte), carreras, estrangulaciones, saltos... y todo eso con un par de botones y la palanca. Sencillito de jugar.

En el apartado dificultad, bueno, digamos que facil no era tampoco. Al reto de ganar a todas las parejas, había que sumarle el conómetro que si llegaba a 00:00 , se acababa la partida, si no metiamos otra moneda para continuar, claro.

El sistema de vida era el siguiente:
Una barra amarilla indicaba la cantidad de energia que teniamos, cuando recibiamos una tollina, de cualquier tipo, la barra disminuia y cada vez estabamos más cansados. ( solo se recargaba cuando ganabamos un combate en el tag match, o cuando estabamos en el rincón mientras nuestro compañero se las veia con otro tipo). En un momento dado el personaje que estaba esperando se ponia en modo "power up", que en otras palabras, estaba deseando salir a repartir ostias. En ese momento nos acercabamos a nuestra esquina y le dabamos el relevo. El personaje que estaba con el power up, era capaz de hacer presas al oponente sin resistencia alguna, y el daño que le hacia era mayor que en estado normal.

Saltar desde lo alto del ring, hacer movimientos finales, salir del cuadrilatero para hacer alguna que otra trampilla, y un sin fin de llaves, convirtieron este juego en uno de mis preferidos, y de los pocos que han conseguido acabarselo en modo tag macht con cinco duritos. ja ja.